lunes, 30 de marzo de 2009

Parkour como forma de vida

Tuve la oportunidad de ver el último documental de Northern Parkour, llamado Parkour – Challenge of movement (está colgado en youtube) . Es un video que explica que es el Parkour pero de una manera simple, integral y por sobre todo, desde una perspectiva muy novedosa. Como forma de vida.
Quise compartir en este texto varias ideas que me quedaron dando vueltas y que son muy interesantes, además de ponerle de mi cosecha.

La mayoría de los deportes y hobbies son usados por los individuos como escapes de la vida diaria. Generalmente corresponden a actividades que no son integrales para el sujeto, sino que consisten en la explotación de una habilidad de este. Además se postula la idea de que estas actividades son impuestas por la sociedad, y no necesariamente una iniciativa nacida del sujeto. El sujeto no crea sino que elige de una gama de posibilidades expuesta por la sociedad. Se suma a esto el estilo de vida de la cultura neoliberalista imperante. El sujeto es visto como parte de la sociedad pero se ignora o se ha olvidado que es un ser único e irrepetible. En consecuencia se pierde la libertad de pensar y actuar de acuerdo a las necesidades personales y nos enfocamos en satisfacer la norma social. Existe un conformismo y una aceptación. Esto es explicado como la época de la conveniencia, buscamos lo que la sociedad quiere de nosotros y no al revés.
En esta dirección, el Parkour es mostrado, no como un escape de la vida, sino como un camino para la vida. La verdadera motivación de practicar Parkour es expuesta como encontrarle un sentido en lo cotidiano, en mejorar la calidad de vida, en ser feliz con esa vida.
El sujeto es visto como individuo único, no hay competencia. Es sólo el sujeto y el obstáculo, por lo que el camino al éxito está centrado cien por ciento en el sujeto y no en el desempeño de otros. Esto nos lleva a otro punto muy importante: el Parkour como disciplina del movimiento no busca sólo mejorar las capacidades físicas y mentales, sino también para mejorar las capacidades de la vida diaria. En estar preparados para el reto de la vida.
Las ventajas expuestas en este punto son el logro de una buena condición física; en como esta condición nos puede permitir socorrer a otros en caso de emergencia, y como podemos ayudarnos a nosotros mismos en estos casos; en el trabajo mental de evaluar nuestras propias capacidades y las características del entorno; y como todo esto tiene aplicación a situaciones no-físicas de la vida diaria.

Es evidente que el Parkour no es sólo un ejercicio físico que tiene la ventaja de ser más flexible, didáctico y amoldable al entorno y a las capacidades del sujeto; sino también un ejercicio mental. En esto se hace mucho hincapié.
El reto de lograr algo, de probar nuestras habilidades es muy importante y es una herramienta que ejercita valores como el esfuerzo, la decisión y la perseverancia. Uno de los resultados es la expansión de la forma de ver la vida: efectivamente todo sería posible de alcanzar con trabajo duro, dentro de las capacidades humanas (muchas veces olvidadas por nuestra “involución [este tema lo trataré en otro tópico]). Además se aborda el tema del fracaso como el reflejo de algo que se está haciendo mal, y como a través del análisis y aplicación de las habilidades puedo evaluar que hacer, que no hacer y como mejorar en ese aspecto. La seguridad en el Parkour es no hacer algo para lo que no se está preparado.
Otro de los resultados es el impacto en nuestra condición física y en el cerebro. El entrenamiento constante que apunte a esta dirección permitiría una mejor adaptación del ser humano a su ambiente, además de una vida más plena en cuanto a no tener la necesidad de ser una especie dominante, sino una lo suficientemente preparada para adaptarse óptimamente y sobrevivir, en términos evolutivos en cualquier parte y situación.

En resumen, la finalidad del Parkour no sería algo tan etéreo o vanal como muchos piensan, sino que tendría un fin práctico en mejorar la calidad de vida del sujeto, en cuanto a reconocerse como individuo; conocer, disfrutar y explotar sus habilidades; explotar estas habilidades en el área social, con el resto de las personas; e influir en la sociedad en que se está inmerso y no al revés. Recuperar habilidades “perdidas” con las ya aprendidas podría promover una evolución de la especie.

domingo, 15 de marzo de 2009

No obstáculos. Oportunidades.


Me considero una persona que necesita compenetrarse con cada cosa que hace. Buscarle un sentido, no sólo para motivarme, sino también para adaptarlo a mi forma de vida.Somos lo que hacemos.

La disciplina de Le Parkour me ha ayudado a afirmar muchos cabos sueltos en mi vida. No quiero decir que el convertirme paulatinamente en Traceur haya sido una panacea, eso lo encontré en Cristo, al permitirme tener una relación cercana con Dios mismo y tener una vida plena. Lo que quiero decir es que el practicar Le Parkour me ha facilitado el fortalecer aspectos de mi personalidad que eran débiles. Lo rico de esto es que el tiempo terrenal que me quede será un camino lleno de debilidades que enfrentar y convertir en fortalezas.

El tiempo que llevo practicando esta disciplina he visto a gente ir y venir. Es algo conocido, no es un discurso nuevo el que escribo. Lo que me motiva a escribir esto es reflexionar sobre mi propia visión sobre Le Parkour.
Recuerdo un video sobre Chris Sharma, un conocido escalador libre. Dice que la escalada libre es una forma muy creativa de arte. Al igual que otras disciplinas atléticas, consiste en contemplar bellas cosas en la naturaleza e interactuar con ellas. Es el mismo pensar que tengo sobre Le Parkour. Es contemplar la belleza de la creación desde un punto de vista creativo, interactuar con ella de una manera distinta, innovadora, mas íntima. Esta interacción nos hace crecer a cada momento, si nuestra relación con él es responsable, nos invita a cuidar el entorno, a cuidarnos a nosotros mismos como parte de este y nos invita a cuidar al resto como parte de esta gran obra de arte.
Lo que resulta de todo esto es más que una bonita foto, o el aplauso de terceros, o un lindo video o un nuevo éxito. Es la transformación de la naturaleza y de lo urbano a nuestros ojos, y como, a la vez nosotros mismos somos transformados por estos. Por eso cuando leo o escucho la definición de Parkour como pasar obstáculos de forma eficiente, no me conformo. Prefiero decir que no son obstáculos los que tengo enfrente, son oportunidades.
Oportunidades de crecer como ser humano y parte de la Creación. Somos parte del todo y en algún momento olvidamos esto. El Parkour es una necesidad de volver a nuestras raices, de comunicarnos con el entorno.
La utilidad de la disciplina respecto al ser útil se desprende del nuevo ser en que nos transformamos para los otros.

El Parkour para mí es una íntegra interacción con el todo, buscar a cada paso una nueva oportunidad de transformarlo todo, incluido uno mismo.