domingo, 11 de julio de 2010

Nostalgia

Extraño los viejos tiempos.

No es que lleve mucho tiempo en el Parkour. Pero en este poco tiempo, muchas cosas han pasado. Se ha popularizado tanto, hay tanta información en todas partes que da la impresión de que ya nada sorprende demasiado.
No digo que esté mal el que la gente aprenda sobre esta disciplina, al contrario. Me gusta verme como alguien que disfruta con la difusión del Parkour.
Sin embargo hace un buen, buen tiempo que tengo esta sensación, un nosequé, como de que algo falta. Una parte del mensaje se perdió en el camino. Puede ser que ahora todo parece ser más fácil en las nuevas generaciones, me sorprende la velocidad con que los nuevos practicantes están aprendiendo nuevas cosas, motivados por videos en que lo que importa es el estilo y cuanto gires. No es malo. Son notables las habilidades, pero algo falta.
La frase ser fuerte para ser útil, o ser y durar se me hacen tan carentes de sentido. Parece que lo de hoy es más bien vive rápido y muere joven.
Por ejemplo, hace mucho, mucho tiempo no puedo encontrar a alguien nuevo que esté dispuesto a mandarle una tardecita de puro acondicionamiento, quemar músculos, hacerse fuerte, probar romper límites. Quienes han querido estar dispuestos se engañan a si mismos, se arrepienten y hacen algo más fácil, algo que les de satisfacciones más inmediatas. Invitas a algunos en algún lugar y parecen entusiasmarse hasta que les dices que no quieres hacer Parkour, sino juntarse a hacer ejercicio. Justo recuerdan tener otro compromiso, y luego los sorprendes en sus fotos en facebook, haciendo acrobacias.

Y la fama... extraño los tiempos en que nadie se conocía y que era tremendo juntarse y conocerse, sin "curriculums virtuales" sino con calle. Extraño lo underground, lo desconocido que era para casi todos lo que hacíamos.
No tengo problemas con que todo el mundo ahora sepa lo que hacemos, pero se perdió el contenido. Me parece tanto que se está promocionando un huevo de pascua, sabroso por fuera, pero vacío por dentro. Eso o quienes están recibiendo el mensaje no lo entienden.
Querer figurar, tener un pedazo de cielo. Parece que el anonimato es un defecto en estos tiempos.
He escuchado de algunos que dicen que la vieja escuela está pasada de moda. Lo actual es el estilo, dejar marca, sorprender a otros. Y los push ups, las pistolas, los abdominales están demás. Me siento un dinosaurio a ratos, pasado de moda. Pero no es esto lo que me afecta sino que con quienes empecé estén desapareciendo.

Disfruto más que nada las juntas pequeñas con los viejos compañeros.Los silentes, los fieles, aperrados. Los hermitaños amigables, como les digo con cariño, los highlanders. Los hombres fuertes, por sobre los niños artistas. Los que también se sorprenden con un traceur que gira como trompo en una barra, pero siente la misma motivación con un muscle up o un dinámico mutante.

Hoy me siento pasado de moda, pero realizado. En solo training, haciendo cosas no tan fashion, me encuentro a mi mismo. Había olvidado palabras que dije yo mismo tiempo atrás. No necesito ser aprobado por nadie en lo que hago, este es un camino interno. No necesito un comentario de apoyo o de desaprobación de nadie, porque nadie más lo entiende. Si, la gente puede saber que hago Parkour, pueden encontrarlo cool, a la moda, lo que sea, pero nadie sabe porqué lo hago, y aunque les dijera dudo que lo entenderían. Y creo que el camino de popularidad puede nublar el juicio, hacer olvidar el porqué se empezó.
Para mi, el que sólo se vea el cascarón es importante, se que otros piensan distinto, y lo respeto. Pero cuando uno predica el autocuidado y el ser fuerte y quienes reciben el mensaje se van volviendo frágiles, débiles, superfluos, algo está pasando. No pretendo ser criticón, sino reflexionar sobre esto.

Se que en parte quizás soy culpable de esto. Uno no puede con todos los factores que incitan a otros a practicar Parkour, cada uno tiene su conciencia y amor propio en cuanto a cuidarse. Sin embargo, ahora, entiendo más que nunca el cuidar a quien se le guía, porque creo que ahí hay una responsailidad personal.

Creo que me estoy yendo por las ramas. Sólo quería reflexionar sobre todo esto, desahogarme. El otro día pude compartir on Rena y varias cosas se me quedaron dando vuelta. En parte están aquí.


4 comentarios:

  1. Que acertada reflexión, yo tambien extraño aquellos tiempos en los que recien comenzaba en esto, por suerte aún quedan los traceurs de antaño con los cuales compartir tan buenos trainings... saludos toro!

    ResponderEliminar
  2. bueno, a mi me paso algo curioso, por la "u" no he entrenado a lo que llamaba entrenamiento, por todo un semestre y ahora me estoy enterando de todo este cambio, tengo que asimilarlo de apoco, no queda otra.
    pero no se si es mi forma de ser, pero tomarmelo con ironia y risa.
    como dice confusio.
    "no esperes mucho de los demas, te ahorraras disgustos" es frio, pero mas que no esperar algo de alguien, yo creo que si te llega a defraudar, no te sientas mal por eso, no lo puedes controlar.
    saludos!

    ResponderEliminar
  3. la verdad es que me parece muy bueno tu comentario toro, me parece que la diferencia entre los que tu llamas vieja escuela y las nuevas generaciones de practicantes de parkour es muy notoria, incluso cuando uno ha tratado de enseñar de buena forma a dichas generaciones, pero hay factores que uno no puede controlar. a fin de cuentas no somo profesores y tambien tenemos derecho a disfrutar del parkour jajaja!!! espero que nos veamos pronto es un viaje a valpo y juntar la vieja escuela!!

    saludos
    Ro.
    Zakingen.

    ResponderEliminar